Entrevista de quince preguntas a Alain Johannes
"Al final no tengo una bolsa de trucos porque, aunque llene una, no siempre funcionará la próxima vez".
¿Cuándo comenzó a escribir/producir música? ¿Y cuáles o quiénes fueron sus primeras pasiones e influencias? ¿Qué tiene la música y/o el sonido que lo atrajo?
Empecé a tocar alrededor de los 4 años, aprendiendo algunos acordes y eligiendo canciones. Mis primeras influencias fueron The Beatles, Led Zeppelin, Paco De Lucia, la banda sonora de Jesucristo Superstar, Queen y mucho jazz, Coltrane, Miles, Dolphy…
Tengo recuerdos tempranos de la música que creaba en mí una sensación de conexión y emoción, y me encantaba el espacio en el que entraba en mi mente, el parloteo desaparecía y el mundo ya no daba miedo, se convertía en lo contrario, en un lugar mágico. Mis primeras canciones y riffs los escribí cuando tenía unos 13 años y definitivamente tenían un aire muy setentero.
Para la mayoría de los artistas, la originalidad está precedida por una fase de aprendizaje y, a menudo, de emulación de otros. ¿Cómo describirías tu propio desarrollo como artista y la transición hacia tu propia voz? ¿Cuál es la relación entre copiar, aprender y tu propia creatividad?
Mucho más que el tiempo que pasé aprendiendo a tocar mi instrumento y luego otros instrumentos, le doy crédito a las interminables horas que escuché y absorbí música de diferentes culturas y géneros. Me atraía la música clásica india y el fraseo que tenían los vocalistas e instrumentistas. Traté de imitar eso en mi guitarra. El jazz y la música clásica ampliaron mi paleta armónica al mismo tiempo que la música rock en todas sus variantes me emocionaba con la energía visceral y la libertad de hacer lo que quisiera.
¿Cuáles fueron tus principales desafíos compositivos y de producción al principio y cómo han cambiado con el tiempo?
Todo es proceso. Así que, a medida que pasan los años, aprendemos de cada experiencia y seguimos aprendiendo y viviendo. Además, el equipo va cambiando. Al principio, tenía grabadoras analógicas y sintetizadores, etc. Luego, lo digital empezó a tomar el control, haciéndolo más asequible, pero no siempre tan bueno en cuanto al sonido, así que tuvimos que superar eso. Creo que cada álbum que hago o produzco tiene sus propios desafíos y un conjunto de atributos y circunstancias únicos, así que siempre estoy inventando y tratando de estar instintivamente en sintonía con ese proyecto en particular. Al final, no tengo una bolsa de trucos porque, incluso cuando lleno uno, no siempre funcionará la próxima vez.
¿Cómo fue tu primer estudio? ¿Cómo y por qué razones ha evolucionado tu configuración a lo largo de los años y cuáles son actualmente algunos de los equipos más importantes para ti?
Mi primer estudio era simplemente una grabadora Stephens de 2”, 16 pistas, algunos micrófonos y una pequeña consola analógica instalada en el dormitorio. He estado coleccionando instrumentos desde que era un niño, así que ahora mi configuración es la suma total de todos esos años de reunir instrumentos, micrófonos y equipos externos. Es bastante extensa y va desde lo barato a lo bastante valioso. Todo tiene una finalidad. Al final, mi Jazzmaster original y mi Cigfiddle son las dos piezas más importantes. Todo lo demás lo pude encontrar de nuevo.
¿Cómo haces uso de la tecnología? En términos del mecanismo de retroalimentación entre la tecnología y la creatividad, ¿en qué sobresalen los humanos y en qué sobresalen las máquinas?
Bueno, con suerte la división se minimiza y es una extensión de la creatividad de uno. Todas son herramientas que ayudan a manifestar un impulso creativo en una pieza musical. En ese sentido, el cuerpo humano es parte de este continuo.
Ya sea que esté tocando una flauta de bambú, cantando, golpeando un tambor o usando pedales en mi guitarra a través de un amplificador particular grabado a través de un micrófono particular en un preamplificador de micrófono, en un DAW y luego aplicando complementos, todo es parte de ello para mí. Diré que la tecnología lo ha hecho más asequible y ha permitido un espacio creativo en casa o en la carretera, lo cual es fabuloso. Puedes hacer un álbum en cualquier lugar y en cualquier momento.
Las herramientas de producción, desde instrumentos hasta entornos de software complejos, contribuyen al proceso de composición. ¿Cómo se manifiesta esto en tu trabajo? ¿Puedes describir la coautoría entre tú y tus herramientas?
Me encanta incorporar cadenas de efectos complejos y motores de muestra, así como sintetizadores de software, de una manera que pueda interpretarlos de manera que lo que toco tenga una calidad multidimensional, incluso aunque simplemente esté tocando la guitarra. Tengo una pastilla midi, así como un sintetizador de guitarra y cadenas de pedales estéreo y un pequeño teclado que puedo tocar simultáneamente. Pude hacer eso bastante para la banda sonora de Ghost Recon Breakpoint.
También disfruto creando plantillas de instrumentos con combinaciones interesantes con mis bibliotecas de muestras para aprender sobre texturas y orquestación.
Las colaboraciones pueden adoptar muchas formas. ¿Qué papel juegan en tu enfoque y cuáles son tus formas preferidas de interactuar con otros creativos a través, por ejemplo, del intercambio de archivos, improvisaciones o simplemente hablando de ideas?
Prefiero estar en la sala juntos creando como una unidad en general. Pero si eso no es posible, es genial poder colaborar a distancia. A menudo participo como invitado en las canciones y agrego cosas por mi cuenta. Con Mark Lanegan, trabajamos juntos después de haber preparado las bases principales y, después de su voz, a menudo enviamos la pista a músicos increíbles de todo el mundo para que agreguen su magia. Nuevamente, sería increíble reunirnos todos al mismo tiempo y en el mismo lugar, pero a menudo no es posible debido a los costos y los cronogramas.
¿Podrías contarnos cómo es un día en tu vida, desde una posible rutina matutina hasta tu trabajo? ¿Tienes un horario fijo? ¿Cómo se retroalimentan entre sí la música y otros aspectos de tu vida? ¿Los separas o, en cambio, intentas que se combinen a la perfección?
Estoy muy atento a cuándo llega la inspiración; la espero, por así decirlo. Una vez que llega, lo más probable es que lo termine. Mis álbumes en solitario son así: los escribo y grabo en unos pocos días. En realidad no tengo un horario, excepto cuando estoy produciendo, por supuesto, entonces me preparo lo mejor posible y simplemente me dejo llevar por el horario del artista. ¿
Podrías describir tu proceso creativo basándote en una pieza o álbum que sea particularmente querido para ti, por favor? ¿De dónde surgieron las ideas, cómo se transformaron en tu mente, con qué empezaste y cómo refinas estos comienzos hasta convertirlos en una obra de arte terminada?
Hum fue creado en secuencia. Había estado muy enfermo en cama durante un par de meses y acumulé una energía y una necesidad insanas de crear un álbum. Empecé con una secuencia de acordes arpegiados que había escrito con mi guitarra portuguesa, la puse en escena, luego escribí la melodía y la letra, las grabé y luego añadí texturas y más instrumentación. Sabía que ésta sería la primera canción del álbum. Cada día escribía y grababa la siguiente canción imaginando que escuchaba el álbum y lo que vendría después. Trabajo bien sin pensar demasiado y simplemente confiando e improvisando. Escucho mi instinto sobre qué tipo de sonido debería ser y toco para crear la atmósfera necesaria para esta pieza musical, etc.
En el pasado, me he tomado más tiempo para refinar, desarrollar, cambiar, reescribir, hacer demos y volver a hacer demos, pero al final, nunca me ha dado esa sensación poderosa de la grabación rápida original en una grabadora o en una nota de voz. Natasha y yo en Eleven a menudo nos encontrábamos yendo al estudio con solo una o dos canciones listas y confiando en que el resto vendría, jajaja. Supongo que fue entonces cuando empezó este enfoque.
Hay muchas descripciones del estado mental ideal para ser creativo. ¿Cómo es para ti? ¿Qué apoya este estado mental ideal y cuáles son las distracciones? ¿Existen estrategias para entrar en este estado más fácilmente?
Para mí es el dolor o la necesidad de comunicar un sentimiento poderoso y profundo dentro de mí que necesita ser liberado. Lo he hecho en un profundo dolor y la música es la única forma que conozco de expresarlo. Así como una profunda alegría. Las distracciones desaparecen en este estado. Como dije antes, siento que me llama y se apodera de mí. No puedo obligarlo a que suceda.
"En el pasado, me ha llevado más tiempo refinar, desarrollar, cambiar, reescribir, hacer demostraciones y volver a hacer demostraciones, pero al final, nunca me ha dado esa sensación poderosa de la grabación rápida original en una grabadora o una nota de voz".
¿Cómo se conecta tocar en vivo y escribir música en el estudio? ¿Qué logras y extraes de cada experiencia personalmente? ¿Cómo ves la relación entre la improvisación y la composición en este sentido?
Hay un aspecto tanto de la improvisación como de la composición, que supongo que en mi caso, imagino que la composición es una especie de guía consciente y suave de la improvisación. Es difícil de describir exactamente, porque estar en el escenario o en el estudio es una especie de experiencia fuera del tiempo en la que pienso menos.
¿Cómo ves la relación entre los aspectos "sonoros" de la música y los aspectos "compositivos"? ¿Cómo trabajas con el sonido y el timbre para cumplir con ciertas ideas de producción y de qué manera ciertos sonidos pueden adquirir cualidades compositivas?
Para mí, el sonido es parte de la composición. A menudo mueve o inspira una cierta melodía, creando un estado de ánimo que parece ser parte de la lógica interna o del mundo en el que existe la composición. Siempre que consigo un nuevo instrumento y empiezo a aprender y experimentar con él, lo que sale de mí suele ser sorprendente e inesperado, como si el sonido estuviera extrayendo algo nuevo.
Al final, se convierte en algo natural decidir qué tipo de texturas se necesitan para una pieza musical en particular. Algunos pueden usarse tradicionalmente para el propósito previsto, otros pueden ser maravillosos y funcionar bien aunque no sea el uso habitual. Por ejemplo, un banjo de arco afinado en quintas fundamentales tiene una especie de sensación medieval/pagana o de zanfona. Es muy divertido experimentar con enfoques y técnicas inusuales. La flauta con el parche quitado y tocada como una trompeta suena muy similar al Duduk.
Nuestro sentido del oído comparte conexiones intrigantes con otros sentidos. Según tu experiencia, ¿cuáles son algunas de las superposiciones más inspiradoras entre los diferentes sentidos y qué nos dicen sobre la forma en que funcionan nuestros sentidos? ¿Qué sucede con el sonido en sus límites más externos?
El sonido puede ser muy visual para mí; no solo en sus profundidades físicas sino también con respecto a cualidades más abstractas como calidez, frialdad, ira, etc.
Puede tener textura como áspera, cortante, suave, líquida también. Existe interna y externamente. Vibra físicamente en nosotros. La sensación de cantar o tocar el saxofón o un violonchelo resuena a través de nuestros cuerpos. Podemos imaginar la música y es casi tan real como oírla. A menudo oigo música en mis sueños y he intentado aferrarme a ella al despertar. A veces funciona.
El arte puede ser un propósito en sí mismo, pero también puede retroalimentar directamente la vida cotidiana, asumir un papel social y político y conducir a un mayor compromiso. ¿Puedes describir tu enfoque del arte y de ser artista?
Crear música y ayudar a otros a crearla, así como tocar en vivo solo o con otros, es la forma más conectada, viva y en paz que siento. Lo uso para comunicar mis experiencias, lo que se siente al existir, luchar, amar, sentirse parte de la naturaleza y de todos los seres vivos. Es un lugar sagrado y un estado del ser cuando te pierdes en él.
Es notable, en cierto modo, que hayamos llegado al siglo XXI con el concepto básico de la música todavía intacto. ¿Tienes una visión de la música, una idea de lo que podría ser la música más allá de su forma actual?
Ha existido desde el principio. Está en la naturaleza y en nosotros y mientras estemos aquí seguiremos haciendo música. Su esencia no cambiará, pero en cuanto a las formas que pueda adoptar, no puedo predecir realmente.
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